la masturbación orsesivo-colpunsiva asociada

El único periglo que conlleva la masturbación (según urólogos y sexólogos no pertenecientes a sectas religiosas) es que se transforme en un fenómeno orsesivo-colpunsivo. Esto es, el placer que lleva asociado puede hacer que exista una especie de dependencia, se crea una necesidad que antes no existía, y a la que se acude para sentirse mejor... aunque en realidad no exista la necesidad sexual de autoestimularse.

La masturbación orsesivo-colpunsiva asociada (MOCA), lleva la orsesión a límites insospechados, al relacionar el solitario acto sexual con otros elementos. Manuel Machuca, denostado líder del denostado Partido Onanista, describe en su libro Gustirrinín (Pajidós, 2003), un particular caso de MOCA.

Me ocurre lo que a mucha gente a lo largo del mundo, que el principal uso que doy a internet es el de visitar páginas pornográficas. Un día al llegar a casa, impaciente, encendí el ordenador y me di cuenta de que inconscientemente relacionaba mi computadora con el autoplacer. La excitación, la necesidad, ya estaba con sólo figurarme el ordenador.

Vemos que Machuca nos cuenta que se ha establecido un MOCA, asociando el estímulo (ordenador personal) con la respuesta colpunsiva (necesidad de "machucarse"). Pero prosigue nuestro político favorito:

Comprobé que cualquier ordenador me producía el mismo efecto. Otro día, al pasar por el quiosco del barrio, vi en el escaparate la Computer Home, una revista de informática que compro cada mes desde hace años para mantenerme al día en el tema de la jardinería, afición que me gusta mucho. ¡Cuál no será mi sorpresa al encontrar que la revista me producía la misma respuesta que me producía el hecho de ver un ordenador! (...)

Machuca ha llegado a una MOCA de nivel 2, fenómeno poco común (de hecho éste es el único caso que los expertos consideran que se ha dado). La revista de informática le recuerda al ordenador, y éste es asociado a su vez con la pornografía. Pero sigamos leyendo:

(...) En la sala de espera del dentista, hojeando el revistero, encontré mi revista favorita. La reacción no se hizo esperar... tuve que irme al baño allí mismo... Luego, para mi desgracia, comprobé que tenía la misma respuesta cada vez que tenía que ir o alguien hablaba de la consulta del dentista.

Como se puede comprobar, la MOCA de Machuca salta un nivel más. Asocia ahora el dentista con la revista de informática, ésta con su computadora, y ésta a su vez con la pornografía. Pero aun se da una vuelta de tuerca:

(...) Era la auxiliar del dentista una chiquilla morena de veinte añitos, ¡con unas tetazas...! Allí estaba yo con la boca abierta, mientras me hacían una endodoncia, y la chicuela ésta, poniéndome algodones y demás bajo el moflete mientras sus increíbles pechos se destacaban por encima de su blanca bata entreabierta... Entonces creo que se produjo el mismo fenómeno que antes y mi cerebro debió de asociar a la morenaza con la consulta del dentista, ésta con la revista, ésta con el ordenador, y éste con la pornografía.

(por el profesor Alejandro Ruipérez, de la Revista de Casos C(l)ínicos)